Ser líder espiritual y miembro de la comunidad LGBTI le ha generado duras críticas y controversias sociales.
La historia de Jhon Botia Miranda, oriundo de Villavicencio (Meta), fue contada por el portal web mexicano El Diario de Morelos, en donde se relata que {{Botia Miranda nació en Villavicencio y actualmente tiene 31 años, dice que jamás pensó en convertirse en pastor y que siempre se imaginó viviendo de la construcción de casas y con la recolección de agua en beneficio de los más necesitados, quería ser misionero. Sin embargo, la vida se encargó de mostrarle que su plan era con las misiones pero desde el púlpito}}.
Su congregación se denomina Iglesia Colombiana Metodista, ubicada en Bogotá, desde donde predica mensajes de tolerancia, respeto, convivencia, amor propio y por el prójimo, y otros consejos que han generado polémica. Además, es promotor de diversas actividades sociales.
{{Cuando estaba próximo a cumplir 20 años, Jhon se mudó a Bogotá y se generó una paradoja en su vida: la iglesia a la que asistía era muy conservadora y él tenía una “lucha interna complicada”}}.
El consagrado pastor llanero, cuenta que ha tenido duros momentos en su labor pastoral, pero también ha sido privilegiado con personas que lo han apoyado.
{{Al ser nombrado como pastor, por su condición sexual, buena parte de la comunidad ‘enfureció’. Cuenta que la Conferencia Episcopal dijo que su nombramiento no era válido y en otras congregaciones cristianas denominaron a la Iglesia Metodista como la ‘iglesia de los maricas’}}.