De 13 millones de dosis aplicadas el porcentaje de eventos adversos es del 0,07%.
Un permanente programa de vigilancia sobre eventuales efectos adversos posteriores a la vacunación contra el covid-19 realizado por el Ministerio de Salud, el Instituto Nacional de Salud y el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), mostró que todas las vacunas que hacen parte del portafolio de Colombia, además de efectivas, son seguras.
Así lo señaló ayer el Ministerio de Salud tras cuatro meses de la puesta en marcha del Plan Nacional de Vacunación.
«En este análisis, en el que se incluyeron más de 13 millones de dosis aplicadas hasta el 15 de junio, encontramos que la ocurrencia de eventos adversos posteriores a la vacunación es menor de 0,07%. La tasa de reporte muestra que esto es equivalente a 62 personas por cada 100 mil dosis aplicadas», aseguró Julián Fernández, director de Epidemiología y Demografía de la cartera de Salud.
Además, no se encontraron diferencias importantes en la seguridad entre las vacunas examinadas, aseguró el Ministerio.
Si una persona llega a sentirse mal después de ser vacunada, debe consultar los servicios de salud en un centro médico en donde se atenderá la situación que se refiera.
Los casos graves llegan a la secretaría de salud departamental o distrital, donde debe existir un grupo de expertos que evalúan el caso, recopilan toda la información, establecen si tal situación de salud (posterior a la vacunación) es atribuible o no a la vacuna.
Para cada evento se analiza desde el punto de vista del programa de vacunación, el biológico aplicado y los demás insumos usados para la aplicación, así como la situación de salud de la persona vacunada.