En zona rural de El Retorno miembros del Ejército Nacional hallaron un laboratorio para el procesamiento de sustancias ilícitas.
En el lugar también fueron encontradas 500.000 matas de coca y dos semilleros con los cuales pretendían procesar los narcóticos y luego comercializarlos.
Las operaciones llevadas a cabo por la Cuarta División del Ejército, no solo destruir este laboratorio y erradicar las plantas allí cultivadas, sino que también, da un duro golpe a las finanzas, motor económico que afecta al Grupo Armado Organizado residual E-1.