Tres importantes ríos de Villavicencio se desbordaron y causaron serios estragos, generando la alerta roja en la ciudad.
David Riaño, director de la Oficina de Gestión de Riesgos de la capital metense, aseguró que se adelanta el censo para caracterizar y poder enviar las ayudas a los damnificados de los distinto sectores como Brisas de Apiay, El Brillante y Quintas de Rubiales, por desbordamiento del río Ocoa.
Lo propio ocurrió con el río Guayuriba, siendo afectados sectores como La Cuncia Baja, Las Mercedes, Río Negrito, La Concepción baja y Vegas del Guayuriba. En esa zona ya se envió maquinaria para mitigar el impacto del afluente.
Así mismo, el dique de la margen derecha del río Guatiquía se averió, debido a la fuerza de la corriente, dejando daños y damnificados en Villa Suárez, Emanuel, y más abajo en las veredas Juan Bosco, El Guamo, Caños Negros y Mi Llanito.
En los distintos puntos críticos hacen presencia socorristas de la Defensa Civil, Cruz Roja, Bomberos y la Oficina de Gestión del Riesgo, para evaluar las consecuencias de las fuertes lluvias y buscar las soluciones necesarias.
También hay situaciones de consideración en los barrios Trece de Mayo, Caño Maizaro y Reliquia sectores 2 y 4.
“Seguiremos atendiendo el llamado de la comunidad en los sitios donde se presenten inconvenientes por la ola invernal, porque es el compromiso de todos los organismos que desde temprano venimos trabajando sin descanso”, señaló Riaño.
Hace pocos minutos, el alcalde Villavicencio, Felipe Harman, aseguró que serían 100 las familias damnificadas hasta el momento.
